El 20 de febrero el Festival Internacional de Poesía de Granada (FIPG), Nicaragua, inició sus ciclos de conferencias “Tertulias literarias”, con la ponencia del doctor Jorge Eduardo Arellano.

La poeta Gloria Gabuardi, detalló que han decidido implementar una serie de actividades de manera virtual y presencial, en Hispamer y en otros centros culturales. “Hoy iniciamos con la conferencia que dará el doctor Jorge Eduardo Arellano y esperamos que asistan y nos acompañen, porque es un tema importante y novedoso en honor a Darío, en el mes que celebramos los 103 años de su fallecimiento”.

Gabuardi, esposa de Francisco de Asís Fernández, presidente del FIPG, señaló: “Estamos luchando por mantener vivas las tradiciones culturales y literarias que siempre hemos promovido, como conferencias y recitales. En el caso de ‘El Autor y su obra' lo transformamos en lo que se llama tertulias literarias. También luchamos con los vaivenes propios de la vida, como los problemas de salud; pero seguimos firmes en nuestro trabajo”.

En cuanto a la conferencia, se trata de un resumen de la pequeña obra del fecundo dariista

Jorge Eduardo Arellano
“Rubén Darío en Managua” (2013)

 

 

Cinco son las etapas que puntualiza Arellano sobre la presencia en la capital nicaragüense de nuestro gran poeta universalista.

La primera va de enero de 1882 a junio de 1886 y es la de mayor duración y en la cual se forma intelectualmente, forja sus humanidades clásicas y conoce a fondo la literatura moderna de Francia, como voraz lector de la recién fundada Biblioteca Nacional. También protagoniza su idilio amoroso con la “Garza Morena”, Rosario Murillo Rivas; y aprovecha al máximo amistades claves que lo apoyarán para realizar su carrera, sobre todo Modesto Barrios, Pedro Ortiz y el salvadoreño Juan J. Cañas.

La segunda etapa (marzo-abril, 1889) tiene lugar a su regreso de Chile, donde aprendió a vivir de su pluma y se proyectó internacionalmente, a nivel de lengua española, con su breviario en prosa y verso “Azul…” (1888).

La tercera también fue fugaz: del 26 de junio al 6 de julio de 1892; y corresponde a los días previos a su asistencia oficial a las celebraciones en Madrid del cuarto centenario del descubrimiento de América. Tenía entonces 25 años.

La cuarta etapa es denominada por Arellano “los tres meses decisivos”, de enero a abril de 1893, durante la cual se une en matrimonio a Rosario, a consecuencia de “una página de violencia y engaño”, y se embarca a Nueva York, pasando varias semanas en París, hacia Buenos Aires. Allí vivirá cinco años y se convertirá en líder del modernismo y editará sus grandes obras renovadoras: “Los Raros” y “Prosas profanas”, ambas de 1896.

La quinta etapa se inscribe dentro de “la apoteosis del retorno”, 24 de noviembre 1907 al 3 de abril de 1908. Como la principal ciudad del país, Managua celebró ese retorno con actos memorables. Es nombrado por el presidente Zelaya ministro residente en España, pero no logra divorciarse de Murillo Rivas, el segundo de los objetivos de su viaje.

Y la sexta corresponde a sus días preagónicos: tres semanas (15 de diciembre, 1915-6 de enero, 1916). Dramáticos resultaron esos días y una de sus confesiones fue dirigida al periodista Gabry Rivas: “Antes de morir quisiera que enjugara mis pies con sus hebras de oro una Magdalena arrepentida que me ame”.

 

Fuente: Diario Metro/Nicaragua

Jueves 21 de Febrero de 2019
Ministerio de Educación y Cultura