Hacer cosas con palabras
Rafael Courtoisie

 Por Carolina Alba para el programa Culturas_2 de La 2 de TVE

 


 

 

Hacer cosas con palabras
Rafael Courtoisie

 

 

Por Isabel Alamar
25 de febrero de 2023

 

Rafael Courtoisie  (Uruguay, 1958) rinde un claro tributo y homenaje a las palabras y a sus escritores favoritos (Rilke, Borges, Panero…) en este libro de prosa poética que a modo de diccionario desmenuza más de un vocablo profundizando en todas sus posibilidades expresivas.

Para lograr, un estimulante y continuado efecto de sorpresa, Courtoisie se ampara en recursos muy potentes y heterogéneos como pueden ser el aforismo (“La multitud es uno solo, uno que espera.”); las máximas (“Nadie nos invitó a la fiesta de la vida. Pero hay que bailar”), o las greguerías (“El cráneo es una cáscara que envuelve la pulpa de la fruta del pensamiento”).

En general, adentrarse en este poemario es como tener un pase para bucear en la mente de su autor (“Son las cinco de la mañana. El verano disfrazado de invierno ha oscurecido todo.”). De este modo, iremos conociendo como si se tratase de un diario personal sus diferentes opiniones, reflexiones, anécdotas, etc. acerca de los temas que le preocupan.

Y es que este grandioso poeta vierte en Hacer cosas con palabras todo su bagaje cultural a fin de convertir hasta las cosas más insignificantes en relevantes dotándolas así de un interesante y envolvente misticismo intelectual.

En la página 21, podemos constatar cómo para él la palabra ALMÍBAR, por ejemplo, está cargada de significados y sensaciones, por eso nos la define como “una mujer árabe / completamente desnuda / jugosa, húmeda. / Sin velos”. O también nos hará saber que en la palabra “niño” él sigue viviendo y creciendo, en una de las imágenes quizás más tiernas del libro.

Por otro lado, veremos desfilar palabras casi pertenecientes a cualquier ámbito o esfera del pensamiento, aunque con mayor preponderancia las relacionadas con el hogar (panera, bandeja…); con el lenguaje (esdrújula, prosodia…); con la naturaleza (flores, frutas, verduras…), etc.

En cuanto al tono, será casi siempre festivo y celebratorio. Y el lenguaje se mostrará ágil y desenfadado y yo diría que incluso hasta, en cierta manera, provocador como queda patente en “La manzana del Edén” cuando este poeta nos cuenta en un relato que no tiene desperdicio cómo es seducido por una página en blanco a través de una descripción, que rebosa fantasía e ingenio: “La página se insinúa más, entreabre la boca, separa los labios, abre las piernas, se da vuelta, se mueve más, otra vez, se estira, se encoge, se curva, se ofrece”.

En cuanto a la poesía, asistiremos también a un universo de metáforas, personificaciones, repeticiones, aliteraciones… Y es que Courtoisie es un indiscutible maestro de la Literatura, todo un referente cultural, no en vano, se alzó en 1996 con el Premio Fundación Loewe de Poesía y es Miembro de la Academia Nacional de las Letras de Uruguay.

En este sentido, como amante declarado de las letras nos confesará acerca de los poetas: “Quienes escriben poemas / son como un calígrafo japonés / o chino (…). Cada verso acaricia o golpea / como un pétalo vivo / en el aire”. Y es que para él las palabras constituyen un elemento indispensable para el pensamiento y el conocimiento humano.

De hecho, el poeta hará especial hincapié en esa gran capacidad que posee el lenguaje para expresar múltiples posibilidades: "Hacer cosas con palabras también implica un ejercicio de libertad, una elección. Maldecir o bendecir. Cada uno elige y acepta las consecuencias”, nos dirá.

 

Fuente: Todoliteratura.es

 

Lunes 27 de Febrero de 2023
Ministerio de Educación y Cultura